Buenas lectores, llevaba unos días que no sabía qué escribir, y es que siempre me pasa que no sé que publicar aquí, en Momentos con Mar, siento que al final es más mi confesionario que un Blog donde comentar diversas cosas pero bueno, espero que no moleste.
Ando un poco sensible porque uno de mis conejillos está malito y bueno, me quedo mirándole cada dos por tres sintiendo su dolor, hasta le he puesto el peluche de Momo a ver si le consuela un poco, y de momento funciona.
Cierto, no os presente a nuestros peques de la casa, ahora tenemos tres conejetes, nos hemos pasado pero nuestro amor se queda corto, en serio, hay un conejo de Flandes en una tienda y me muero, porque me encantaría tenerle, pero no puedo darle el hogar que necesita que si no..., me da una pena verle ahí...
Mi madre opina que estoy un poco pesada con los conejos en general (me fascina todo lo que tenga que ver con ellos) pero ya ha asumido que van a ser sus nietos, mi padre por el contrario lo critica, ayer incluso me hizo la broma de venir a comérselos ¬¬ (otra vez).
Hay gente que no entiende que el amor que te da un animal puede ser tan grande como el que te da una persona, a veces incluso más, Momo para mí fue un hijo, y los que tengo ahora los quiero igual, como hijos, a veces pienso que me dan más guerra de lo que daría un niño, pero les quiero muchísimo, Maxko y yo hacemos el sacrificio que sea para cuidar de ellos.
También digo que me considero una mamá, no sólo por cuidar de ellos, muchas veces me descubro pensando en ellos, les mimo muchísimo, soy una pesada yendo al vete y se lo tengo dicho, a mí me verás mucho por aquí, jugamos con ellos casi somo si nosotros fuésemos los niños y además estoy siendo algo así como una consejera para otros conejos ^^U, aunque acabo preguntándole a mi veterinaria pero por lo menos, enseño buenas prácticas de los cuidados del conejo.
Recuerdo que a uno de los sitios que fui donde trabajé puntualmente tenían un conejo y me sorprendí muchísimo, lo gorda que estaba y lo mal cuidada que estaba, no porque la maltratasen si no porque la dejaban sola todos los fines de semana, no la limpiaban adecuadamente y no la daban de comer adecuadamente, no sé cómo estará el animal ahora mismo pero tengo esa preocupación interna cuando me acuerdo de ella ^^U.
El caso es que me gusta dar y recibir mucho amor y aunque es cierto, que lametones sólo nos da uno de ellos, se nota muchísimo el cariño que transmiten, sin necesidad de dar un lametón, sin necesidad de dar un abrazo, el simple hecho de ver cómo te miran cuando te vas o cuando vienes, cuando te acercas, cuando les acaricias, es que son fantásticos.
No envidio a nadie que tenga hijos porque estamos felices de estos hijos cuadrúpedos, aquí os los presento:
Espero que la siguiente entrada sea algo más interesante jeje, lo intentaré ^^.
PD: he actualizado el URL del Blog Tengo un conejo, que han hecho un traslado y ahora la página, está completamente operativa y muy chula :)
